Pues eso, que tras largo tiempo de silencio, vulevo a la carga publicando unas cositas, para colmo de la buena suerte en papel: un relato y un ensayo en el número dos de la revista Cthulhu.
Como es un especial dedicado a los fantasmas, ambas creaciones están relacionadas con ese universo etéreo y perturbador.
Del relato aquí tenéis un aperitivo:
No importa cuántas veces se repita la misma ceremonia, cada viernes, después de la siesta, llueva o el sol derrita el asfalto de la calle: las mismas caras, idénticas expresiones, despedidas acarameladas, furtivas sonrisas; las madres, los padres, cogen de la mano a sus pequeños tesoros. No importa que el cansancio entibie su expresión, porque siempre queda ese rescoldo de alegría, de reencuentro; la carne reconoce a la misma carne, la sangre late al unísono, en una danza hipnótica. La tristeza que empaña los gestos de los niños y niñas, eso de tener que dejar hasta la semana siguiente a sus amigos y amigas, se ve difuminada por esa otra alegría más visceral e instintiva: volver al hogar, sin horarios.
Respecto al ensayo, es un breve texto dedicado al surgimiento de la Ghost Story, las bases sobre las que se sustenta, tanto históricas, literarias como culturales.
Os dejo otra pizca de ello para abrir boca:
La Ghost Story nace hija de su tiempo. La vuelta atrás no es viable. El cuento, la novela gótica no convencen. Las grandes pasiones, las tragedias sangrientas en lugares exóticos, estrambóticos, no colman el ansia de evasión de los lectores y lectoras victorianos. Castillos, heroínas, tiranos, blasfemos, secuestros, asesinatos… no surten el efecto adecuado, sólo risas y mofa. Sin embargo son ellos y ellas personas, podríamos decir alienadas por esas convenciones tácitas, ávidas de emociones al albur de la hoguera y la noche, gente en busca de esparcimiento y recreación, y en este caso concreto, extraño conjunto de buscadores de miedo, de esa emoción que turba nuestra paz emocional, que conmueve el equilibrio en aquello que nos resulta conocido y por tanto seguro.
Darle las gracias a todo el equipo de Cthulhu por su confianza pasada, presente y futura. Y deciros que merece la pena, las críticas son excelentes, el trabajo, estupendo, el resultado inmejorable