Es bueno beber en otras fuentes, comer en otros platos. Y si este blog suele decantarse por la temática terrorífica como algo habitual, no significa que esto sea así siempre.
Voy a hablar de una novela corta, de una de esas joyas de la literatura fantástica escrita por autores no encasillados en tal género, una de esas gemas que quedan enterradas entre los polvos que levanta una hermana mayor.
Hablo de Ligea, del autor italiano Giuseppe Tomasi de Lampedusa. (En otras ediciones se titula El profesor y la sirena)
Todos conocemos la maravillosa El gatopardo; algunos, hasta lo habremos leído y disfrutado con la belleza formal y de fondo que nos presenta, pero son pocos lo que he tenido la oportunidad de conocer que hayan dado con esta novela corta de temática fantástica. Y es que, a veces, la sombra del gigante oculta la exquisited sencilla de otros brotes.
Ligea habla de una sirena, sí, de uno de esos seres mágicos y elusivos, habla de un viejo profesor de lenguas muertas, una eminencia; habla de su juventud, de la juventud llena de planes y dispuesta a entrar en el futuro; de ese momento de felicidad absoluta que a veces la vida nos ofrece, de cómo y porqué ese profesor conoció a una hermosa sirena y de qué aconteció después… de un hermoso pedazo de costa italiano. Y no diré nada más. Sólo que para los amantes del fantástico, debería ser una obra de lectura obligada, o al menos recomendada.
Elegir a Lampedusa es elegir bien, es permitirnos el lujo de pasar un buen rato, de acercarnos a la auténtica medida de la buena literatura, de lo que yo considero literatura de vedad: una historia, una buena historia, bien contada, bien escrita. El único problema: encontrar el libro. Pero, qué vamos a decir los bibliófilos apasionados: en la búsqueda uno también encuentra placer.
*Como noticias de última hora, en Iberlibro, para los curiosos, he encontrado que los ejemplares accesibles son los que usan el título de El profesor y la sirena aunque la edición que leí yo, de Bruguera, tiene el título original.
Lean, lean… y vuelen al mar a buscar su destino.
Lampedusa en wikipedia